Regálese una escapada a un balneario

1 - Una temperatura controlada



Un baño caliente a la temperatura corporal (37°C) ayuda a relajarse, relajar los músculos y recuperarse tras un esfuerzo físico. Sin escaldar, el agua caliente abre los poros y permite que los productos de cuidado de la piel aplicados después del baño penetren más fácilmente.

2 - Una atmósfera suave



Todo lo necesario para relajarse debe estar dispuesto. Para este ritual, olvídese del teléfono, baje la intensidad de las luces, encenda una vela aromática y ponga música relajante. Si es difícil dejar vagar la mente con los ojos cerrados, puede leer un libro o escuchar un podcast.

3 - Cuidados seleccionados



Además de la limpieza tradicional de la piel, hay que aprovechar el tiempo a solas y el calor del agua: 


- Una exfoliación suave para eliminar las células muertas y dejar la piel resplandeciente. 


- Una mascarilla capilar. El contacto con el calor abre las escamas del cabello, facilitando la penetración de los principios activos en la fibra capilar. Disfrute de los beneficios de un tratamiento en profundidad. 


- Una mascarilla facial. Al igual que las escamas del cabello, el calor abre los poros de la piel, liberándola de impurezas y toxinas acumuladas.

Será mucho más receptiva a los tratamientos que le apliques: mascarillas hidratantes, calmantes, nutritivas o potenciadoras de la luminosidad. 

4 - Sin olvidar...



No olvide beber agua y respirar lenta y profundamente para relajarse.